Que poner encima de una mesa de comedor: 5 estrategias efectivas

La mesa de comedor es el corazón del hogar, un lugar donde se comparten no solo las comidas, sino también momentos significativos con amigos y familiares. Por lo tanto, que poner encima de una mesa de comedor no es solo una cuestión estética, sino también funcional y emocional. La decoración de la mesa puede influir en el ambiente general del espacio, haciendo que cada comida sea una experiencia memorable. En este sentido, es esencial considerar varios elementos que no solo embellezcan la mesa, sino que también fomenten la interacción y la comodidad entre los comensales.
A través de cinco estrategias efectivas, se puede transformar una mesa de comedor ordinaria en un espacio acogedor y atractivo. Desde la elección del mantel hasta la selección de la vajilla, cada detalle cuenta para crear un ambiente que invite a disfrutar de la comida y la compañía. A continuación, se explorarán estas estrategias en profundidad, proporcionando ejemplos y consejos prácticos para que cada comida se convierta en una celebración.
Elegir el mantel adecuado
La elección del mantel es uno de los primeros pasos para definir la estética de la mesa de comedor. Un mantel no solo protege la superficie de la mesa, sino que también establece el tono del ambiente. Por ejemplo, un mantel de lino en tonos neutros puede aportar una sensación de elegancia y sofisticación, mientras que un mantel de algodón con estampados coloridos puede dar un aire más informal y alegre. La textura del mantel también juega un papel crucial; un tejido suave y fluido puede hacer que la mesa se vea más acogedora, mientras que un material más rígido puede transmitir formalidad.
Además, es importante considerar el tamaño del mantel. Un mantel que cuelga demasiado puede resultar incómodo, mientras que uno que es demasiado pequeño puede parecer desproporcionado. La regla general es que el mantel debe colgar al menos 20 centímetros por cada lado de la mesa. Esto no solo proporciona un aspecto equilibrado, sino que también permite que los comensales se sientan cómodos al moverse alrededor de la mesa. En este sentido, elegir el mantel adecuado es fundamental para establecer la base sobre la cual se construirán los demás elementos decorativos.
Jugar con la iluminación
La iluminación es otro aspecto crucial a la hora de decidir que poner encima de una mesa de comedor. La forma en que se ilumina la mesa puede cambiar drásticamente la atmósfera del espacio. Por ejemplo, las velas son una opción popular que añade un toque de calidez y romanticismo. Colocar velas de diferentes alturas en un candelabro o en soportes individuales puede crear un efecto visual atractivo y acogedor. Además, la luz suave de las velas invita a la conversación y a la relajación, haciendo que la experiencia de la comida sea más placentera.
Por otro lado, las luces suaves y regulables también pueden ser una excelente opción para crear un ambiente acogedor. Las lámparas de mesa o las guirnaldas de luces pueden añadir un toque festivo y cálido a la decoración. Es importante evitar la iluminación demasiado brillante, ya que puede resultar incómoda y poco acogedora. En su lugar, se debe optar por una iluminación que complemente la decoración de la mesa y que haga que los comensales se sientan cómodos y relajados durante la comida.

Incorporar elementos naturales
La incorporación de elementos naturales es una estrategia efectiva para embellecer la mesa de comedor y aportar frescura al ambiente. Las flores frescas son una opción clásica que nunca pasa de moda. Un ramo de flores bien seleccionado puede ser el centro de atención de la mesa, añadiendo color y vida al espacio. Es recomendable elegir flores de temporada, ya que no solo son más económicas, sino que también garantizan frescura y durabilidad. Además, se pueden combinar diferentes tipos de flores y follaje para crear un arreglo más dinámico y atractivo.
Las plantas en macetas también son una excelente opción para decorar la mesa. No solo aportan un toque de naturaleza, sino que también pueden purificar el aire y mejorar la calidad del ambiente. Por ejemplo, una pequeña planta suculenta o un herbario en miniatura pueden ser elementos decorativos encantadores que no requieren mucho mantenimiento. Por otro lado, las frutas frescas, como manzanas, limones o naranjas, pueden ser utilizadas como decoración comestible, añadiendo un toque de color y un aroma agradable a la mesa. Estos elementos naturales no solo embellecen el espacio, sino que también crean un ambiente acogedor y saludable.
Selección de vajilla adecuada
La vajilla es uno de los elementos más importantes a considerar al pensar en que poner encima de una mesa de comedor. La elección de platos, cubiertos y vasos puede elevar la presentación de la comida y hacer que la experiencia sea más especial. Es recomendable optar por una vajilla que refleje el estilo personal y que sea adecuada para la ocasión. Por ejemplo, una vajilla de cerámica artesanal puede ser perfecta para una cena informal, mientras que una vajilla de porcelana blanca puede ser más apropiada para una cena formal.
Además, la variedad en la vajilla puede añadir interés visual a la mesa. Combinar diferentes patrones y texturas puede crear un efecto dinámico y acogedor. Por ejemplo, se pueden mezclar platos de diferentes tamaños y formas, así como utilizar cubiertos de acero inoxidable con un acabado mate para un toque moderno. Los vasos también son un elemento clave; elegir una variedad de tamaños y formas puede hacer que la mesa se vea más interesante y bien diseñada. En este sentido, la selección de la vajilla adecuada no solo mejora la presentación de la comida, sino que también contribuye a la atmósfera general del comedor.
Añadir un toque personal
Finalmente, añadir un toque personal a la mesa de comedor puede hacer que cada comida sea única y memorable. Esto puede incluir la incorporación de accesorios únicos, como servilletas de tela con un diseño especial, o tarjetas personalizadas para los invitados que añadan un elemento de sorpresa y calidez. Estos detalles no solo muestran atención al detalle, sino que también hacen que los comensales se sientan valorados y bienvenidos.
Por otro lado, los textiles que reflejan el estilo personal también son una excelente manera de personalizar la mesa. Manteles, caminos de mesa o incluso centros de mesa hechos a mano pueden aportar un toque auténtico y cálido. Además, se puede considerar la incorporación de recuerdos familiares, como platos heredados o utensilios que tengan un significado especial. Estos elementos no solo embellecen la mesa, sino que también cuentan una historia, convirtiendo cada comida en una experiencia significativa y memorable.


Conclusión
Decorar la mesa de comedor es un arte que va más allá de la simple estética; se trata de crear un ambiente acogedor y atractivo que invite a compartir momentos especiales. Al considerar que poner encima de una mesa de comedor, es fundamental prestar atención a cada detalle, desde la elección del mantel hasta la selección de la vajilla y la incorporación de elementos naturales. Jugar con la iluminación y añadir un toque personal también son estrategias efectivas que pueden transformar cualquier comida en una celebración. Al final, cada elemento cuenta para crear un espacio que no solo sea visualmente atractivo, sino que también fomente la conexión y la interacción entre los comensales, haciendo que cada comida sea una experiencia memorable.
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